Introducción
La
evasión tributaria o defraudación tributaria es un tema
controversial, su solución no es inminente al existir espacios por
donde se puede ser legal; de parte del contribuyente no existe responsabilidad social, al no
darse cuenta que no pagar los impuestos significa no financiar correctamente
los recursos económicos del país, específicamente para las obras públicas, en conclusión uno mismo estaría autoperfudicandose, además ¿qué es evasión y que elusión?
Desarrollo
El
contribuyente al evadir los impuestos está cometiendo un acto ilegal, ilícito y
como tal consecuencia se condena de 5 a 8 años de prisión, cuando el
contribuyente no paga los impuestos que le corresponde está frenando el
desarrollo de los ingresos tributarios al estado, por lo tanto los proyectos se
estarían postergándose y perjudicándose ellos mismos. A demás no contiene ética, pues tal vez el que cumple no se beneficia y quien no cumple se beneficia; con
el simple hecho de que, si unos pagan y otros no, es injusto, por tal razón, el gobierno debe de monitorear
si se cumple o no y sancionar, además para atemorizar a quien no está pagando o
está pensando no pagar.
Pero
no puedes confundir la evasión, con la táctica especial, a la cual se conoce como elusión
tributaria, la elusión cumple con las características de la evasión, solamente
que es lícita, pues el contribuyente busca una forma estratégica para ampararse
de la ley o buscar espacios en ella, lógicamente de esta manera se perjudica
con mayor fuerza al estado.
Los
grupos sociales en donde se ve más controversia en el pago de impuestos son los
grupos gremiales como ingenieros, médicos, abogados, arquitectos, pues a estos
se les encuentra un desbalance patrimonial mayormente.
El
gobierno debe buscar la solución a este problema y los ciudadanos de igual
forma cumplir con sus obligaciones tributarias, fiscalizar y sancionar de
manera rigurosa, para acabar este problema.
Conclusión
Resaltando
el mal que ocasionamos a nuestro país al escapar de esta responsabilidad, empezando por cada uno de nosotros mismos entregando o exigiendo una boleta de
venta, para así no entregar excusas al gobierno de que no realicen los
proyectos que se tienen que realizar en nuestro país.
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